Moda inclusiva, rompiendo las barreras de la moda

Published On: septiembre 15, 2021

A veces, algo tan simple como vestirse es una odisea.

¿Te has planteado alguna vez qué pasa cuando no puedes levantar el brazo o no puedes estirar la pierna?

Y no nos referimos a unas agujetas o a una situación temporal como una torticulis, un esguince o unas agujetas con el crossfit.

Hay 1.000 millones de personas en el mundo con algún tipo de diversidad funcional que les limita en su día a día. Para tod@s ell@s nació la moda inclusiva.

 

¿Qué es la moda inclusiva?

Es moda que se adapta a todos los cuerpos y no al revés.

Sillas de ruedas, prótesis, no prótesis… Hay muchos retos por resolver y la moda inclusiva trabaja duro para hacerlo a base de crear e innovar. Eso de que una camiseta es una prenda con un agujero para la cabeza y dos para los brazos no siempre es tan claro.

Las proporciones y las medidas de las prendas las dictan las necesidades de quién las lleva.

Esta moda es inclusiva hasta en su propia actividad. Rompe barreras y no entiende de competencia, hay marcas que tienen servicio de sastrería para ayudarte a adaptar los modelos que más te gustan aunque sean de otros diseñadores.

Que no sea una prenda pensada para ser inclusiva no quiere decir que no se pueda adaptar.

 

Los pioneros de la moda inclusiva

Free Form Style nació por una situación familiar que impulsó a sus creadoras a buscar alternativas y, al no encontrarlas, nació este proyecto.

¿Sus objetivos? Autoestima, Autonomía y Adaptación. Ropa bonita y fácil de poner que se adapta a cada caso.

Camisetas más largas por detrás que por delante para que no se vayan subiendo al moverte en tu silla de ruedas, pantalones sin bolsillos y con velcros o botones de contacto donde normalmente hay cremalleras.

Se puede tener estilazo sin renunciar a la funcionalidad de una prenda.

Hasta hace poco, todas las prendas diseñadas pensando en la comodidad iban algo faltas de estilo. ¿Te has fijado alguna vez en los zapatos de las ortopedias? Pues eso.

Menos mal que alguien ha puesto un poco de orden.

Y tras los primeros atrevidos ya hay grandes marcas como Tommy Hilfiger que se han puesto manos a la obra para crear colecciones en las que lo primero sea su vestibilidad.

Nuevas opciones e ideas para dejar de lado malas costumbres, esas en las que la moda se miraba al ombligo y no a las personas que iban a vestir sus prendas.

 

Soluciones diferentes

¿Qué pasa cuando tienes un cáncer de mama y no quieres hacerte una reconstrucción de pecho?

No es nada fácil.

La feminidad es una actitud y, para defender este principio, hay dos marcas que están trabajando duro para que nos podamos sentir a gusto.

Mango tiene una colección de ropa íntima y de baño para mujeres con un solo pecho, pero ¿qué tienen en común Mango y una pirata irlandesa del siglo XVII?

La marca Anna Bonny ha creado un parche pirata muy siglo XXI. Noelia Morales creó esta marca de monokinis desde su propia experiencia.

“Me inspiré en una fotografía de Helmut Newton de una mujer con un parche en el ojo. Prefiero esa idea de aventura cuando se habla de entender una enfermedad más que hablar de lucha o de supervivencia, no me gusta ese lenguaje bélico”

Y de ahí el nombre, el de una pirada descarada y atrevida que se servía de la belleza para la conquista.

Por cierto, por si no te había quedado claro ya, eso de los cánones de belleza está mal planteado.

Todos somos pura belleza porque eso es algo que sale desde dentro. ¿Y la ropa? 

Está para ayudarnos a expresar lo que sentimos por dentro que, como bien dijo Ortega y Gasset: la moda es un fenómeno de integración y también un medio de expresión